El teletrabajo y los riesgos para la salud: una mirada al futuro
La Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo (EU-OSHA) ha publicado el informe elaborado por Notus sobre teletrabajo y riesgos para la salud; El teletrabajo y los riesgos para la salud en el contexto de la pandemia de COVID-19: pruebas sobre el terreno e implicaciones políticas
La extensión sin precedentes del teletrabajo como consecuencia del brote de COVID-19 ha suscitado dudas sobre el impacto de esta forma de organización del trabajo a largo plazo. Como es probable que el teletrabajo adquiera mayor protagonismo para las empresas y los empleados, la organización del trabajo y los riesgos para la salud son aspectos que requieren mayor atención.
El informe examina los problemas de seguridad y salud en el trabajo asociados al teletrabajo, así como las medidas y normativas vigentes para prevenirlos y gestionarlos. Las entrevistas en profundidad realizadas con trabajadores y empresarios de tres países seleccionados (España, Francia e Italia) ponen de manifiesto las repercusiones positivas y negativas del teletrabajo durante la pandemia.
El informe concluye con recomendaciones para para una adopción del teletrabajo compatible con las exigencias de seguridad y la salud de los trabajadores:
- En muchos países de la UE los cambios en la legislación, la negociación colectiva y los debates muestran una mayor concienciación sobre los riesgos potenciales del teletrabajo para el bienestar y la salud de los trabajadores. La regulación del derecho a la desconexión, la prevención de los riesgos psicosociales y el cumplimiento de las normas de salud y seguridad en el trabajo son aspectos relevantes. Sin embargo, existen grandes diferencias entre los países y no hay pruebas de un enfoque común hacia el teletrabajo seguro y saludable. Una revisión del Acuerdo Marco de la UE sobre el Teletrabajo de 2002 por parte de los interlocutores sociales sería un paso importante.
- Para que las empresas adopten con éxito los acuerdos de teletrabajo es necesario aumentar los esfuerzos para adaptar las prácticas de gestión y organización del trabajo y mejorar las políticas de seguridad y salud en el trabajo. El informe ofrece varias recomendaciones en este ámbito, entre otras: cómo regular el teletrabajo a nivel de empresa; el papel clave que desempeñan los superiores jerárquicos a la hora de fomentar relaciones de confianza basadas en la autonomía y el control del rendimiento de apoyo; la evaluación de riesgos del puesto de trabajo en casa y el desarrollo de políticas integrales de prevención de que impliquen a los empleados en la identificación y prevención de los riesgos psicosociales y físicos para la salud.
- Por último, el diálogo social y la negociación colectiva a nivel de empresa deberían desempeñar un papel más relevante en la regulación de los acuerdos de teletrabajo. Proporcionan un marco regulador más transparente y participativo, fermentan la prevención proactiva de los riesgos psicosociales y garantizan el cumplimiento de las normas se salud y seguridad en el trabajo.
El informe fue elaborado por María Caprile, Juan Arasanz y Pablo Sanz (Notus) en colaboración con Feliciano Iudicone (FGB) y Frédéric Turlan (IR Share) para el trabajo de campo, y Märt Masso (Praxis) para la revisión por pares.
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